El islamismo en Asia

En Asia occidental
En Asia oriental
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El Islam experimentó una expansión prodigiosa, desde el Atlántico al Indico, que es llamativa, aunque sólo sea sociológicamente hablando. Pero un creyente, hombre del Libro, no olvida que Dios bendijo a Ismael, hijo de Abrahám con la esclava Agar, como padre de un pueblo inmenso que no podrá contarse (cf Gen 16, 10 y 21,8-20).

¿Sorprende que en pocas décadas llegara a Persia y al Magreb, en 711-22 el Islam cruzara la Península ibérica hasta Covadonga desde Gibraltar, cruzando el estrecho que hoy surcan en patera muchos subsaharianos, a la vez que se asomaba a la India por el este y al Cáucaso por el norte?

En Asia occidental

En Asia occidental hay unos 250 millones de musulmanes en 21 países: Arabia Saudí, los dos Yemen, los sultanatos del Golfo (Kuwait, Qatar, Bahrein, Mascate-Omán y los Emiratos Independientes), además de Jordania, Siria, Turquía, Chipre, Irak, Irán, Afganistán y los antiguos de la URSS que tienen despierto el nacionalismo desde la caída del muro de Berlín: Kazajstán, Azerbayán, Uzbekistán, Turkmenistán, Tadyikistán y Kirguistán.

En Arabia Saudí la Iglesia católica cuenta con unos 600.000 fieles que tienen prohibido el uso de lugares de culto y la entrada de sacerdotes.
“En la mayoría de países musulmanes –decía en Roma en enero 2009 el Nuncio Mons. Fitzgerald al Encuentro anual de Equipos de Nuestra Señora- hay libertad de culto. Es una excepción Arabia Saudí donde está prohibido el culto público cristiano”. En todos los demás países las comunidades cristianas tienen iglesias y pueden reunirse para el culto, aunque puede haber dificultades para obtener permisos para restauraciones o construir nuevos templos. El número de cristianos va creciendo con los inmigrantes de Filipinas y la India pero todo ciudadano no musulmán es de segunda o tercera división. En septiembre de 2007 el rey Abdallah bin Abdulaziz al-Saud fue recibido por Benedicto XVI.

En Afganistán, los talibanes, apoyados por Pakistán y Arabia Saudí, se hicieron con el poder en 1996 considerando que la república instaurada en 1983 no era suficientemente islámica y, tras ahorcar al dictador comunista Mohamed Najibulá, aplican estrictamente la sharia. Prohíben la tele y que las mujeres conduzcan coches, que acudan a escuelas, que trabajen en lugares públicos y que dejen de llevar el burka, mantón que cubre desde la coronilla hasta la punta de los pies.

En Irán es conocido el caso del empresario alemán de 56 años que fue detenido en el aeropuerto de Teherán por haber mantenido relaciones con una joven estudiante iraní sin estar casado con ella. Tras varios meses de cárcel, fue declarado culpable y condenado a morir por lapidación. La joven debía recibir 99 latigazos. Desesperado, el alemán ofreció casarse con ella y convertirse al islamismo. En septiembre de 1998 se movilizaron 200.000 soldados en la frontera afgana mientras crecía la tensión entre ambos países que parecían irremediablemente encarrilados a la solución violenta. La movilización militar fue con unas maniobras sin precedentes (llamadas Zolfagar) en las que aquellos soldados se sumaban a los 90.000 ya desplegados en dos divisiones, junto con otros 70.000 guardianes de la revolución (pasdarán) acompañados de milicianos islámicos (basidji) que se sumarían a una ofensiva de Teherán. Los ayatolás se enfrentaron a los talibanes porque tenían detenidos a 45 iraníes en manos de los “estudiantes de teología” y por el asesinato de nueve diplomáticos y un periodista iraní por parte de los fundamentalistas afganos.

Irak era el país musulmán donde, con Sadam Hussein, los cristianos se sentían más respetados aunque fue considerado el enemigo número uno de USA desde la caída del muro de Berlín y desde el silencio impuesto a Gadafi por el misil americano incrustado en el baño de una de sus casas. El sufrimiento cristiano no era fruto del gobierno sino de parte de sus habitantes y del embargo internacional que sufrió la población iraquí. El Patriarca de Babilonia de los caldeos, Rafael I Bidawid, en su momento declaró que “Sadam Hussein (...) como hombre de Estado hace que no nos sintamos discriminados”. Era un país profundamente islámico pero el Estado tenía ordenamiento laico y guardaba un respetuoso equilibrio con todas las religiones. Sadam Hussein mandó construir en Bagdad la mayor mezquita del mundo, con capacidad para 45.000 personas.

El 22 de enero de 2010 empezó su mandato en Mosul el arzobispo más joven del mundo, con 41 años, Emil Shimoun Nona que sucede al asesinado Mons. Paulos Faraj Raho, secuestrado casi ya dos años antes en las afueras de su catedral y encontrado muerto diez días después. El Prelado iraquí explicó que desde los ataques de 2003, la comunidad cristiana en esta ciudad ha quedado reducida a menos de cinco mil personas. Después de Navidad de 2009 fueron asesinados dos cristianos y otros cinco heridos.
El miércoles 24 febrero 2010, Benedicto XVI manifestó su preocupación ante la violencia irakí. Adnan al Dahan, comerciante en especias, es el 5º cristiano asesinado en seis días por parte de extremistas musulmanes. Durante las elecciones de 2008 la ola de violencia contra los cristianos supuso 40 víctimas mortales junto a la fuga de 12 mil cristianos de Mosul. Las autoridades dicen que es imposible cuidar la vigilancia de los cristianos.

Jordania es un reino hachemita donde ya no parece existir la anterior amenaza fundamentalista aunque hay grupos integristas influyentes. Las relaciones con la Iglesia son cordiales gracias al fallecido rey Hussein que logró establecer un clima de convivencia con una política de apertura democrática, inusual en los regímenes árabes. La comunidad cristiana es un 3% de la población y la católica un 1,5%. Este país tiene acogidos como emigrantes a unos millones de palestinos y un millón de iraquíes que huyen de sus casas por los conflictos bélicos.
Benedicto XVI, en mayo de 2009, visitó pastoralmente este país que cuenta con algo más de cien mil católicos. Visitó la mezquita de Amán y condenó la manipulación política de las religiones. Respondió a su discurso el Príncipe Ghazi Bin Muhammed Bin Talal, primo y consejero del rey de Jordania, presidente del Instituto al-Bayt para el Pensamiento Islámico y una de las figuras más destacadas mundialmente en el diálogo interreligioso, y dio por zanjada la controversia a propósito de la lección del pontífice en Ratisbona y lo saludó como “sucesor de Pedro”.

Siria fue importante tierra cristiana en los inicios y a donde Saulo de Tarso acudió a Damasco para exterminarlos. Allí, en Antioquía estuvo Pedro antes de ir a Roma. Ahora los cristianos son el 10% de la población siria que viven en doce comunidades, cada una con su estilo y su liturgia; algunos rezan todavía el Padrenuestro en arameo, la lengua de Jesús.
Siria se va abriendo a Occidente y a la economía de mercado aunque sigue aumentando la emigración de los cristianos. Su influencia en los últimos lustros sobre el Líbano ha sido perjudicial para la comunidad cristiana libanesa donde la guerra de los 80 fue una persecución y expulsión casi radical de los cristianos, sobre todo los de las estructuras estatales y de gobierno, a pesar de haber sido, durante décadas, hombres ejemplares como políticos de paz y convivencia.
Las celebraciones en Siria con ocasión del Año jubilar paulino fueron vividas con total libertad pues la Constitución y el Derecho civil sirio considera a todos los ciudadanos iguales.

En Turquía los franciscanos están presentes desde el siglo XIII para vivir el espíritu de san Francisco y el diálogo como hizo él en Damietta en 1219 con el sultán Malik-al-Kamil. En el s XX quedan cien mil fieles que siguen siendo maltratados no sólo por la fuerte presión islámica (son un 99% de los 60 millones de habitantes) sino por el nacionalismo laicista impuesto por el Ejército y la actual mayoría parlamentaria que sofoca cualquier intento de crecimiento cristiano. Es un laicismo de Estado que también quiere golpear al islamismo extinguiendo sus escuelas y logrando que el Tribunal Constitucional prohíba el Partido Islámico de Bienestar.

Los cristianos asirio-caldeos de la provincia de Tur Abdin han sufrido dramáticamente en estos últimos años pues los kurdos y el Ejército les hacen la vida imposible en el sur del país: eran un millón y han quedado varios miles. También los ortodoxos y los armenios han sufrido verdadera persecución.
“Para ir a Estambul hace falta mucha fantasía: no os diremos qué tenéis que hacer”, fue la “consigna”, recibida por fray Rubén Tierrablanca, entonces guardián de la casa generalicia de los frailes menores en Roma, cuando en 2003 acogió la invitación de crear con otros dos compañeros la Fraternidad internacional de Estambul, para la promoción del diálogo ecuménico e interreligioso.
El 18 abril 2007 tres cristianos (dos turcos y uno alemán) fueron asesinados en una editorial cristiana en el este (Malatya). Estaban con manos y pies atados y degollados. El año anterior un sacerdote fue abatido por un pistolero joven. Un periodista armenio cristiano había sido también disparado con pistola por otro joven. En febrero de ese año el Cardenal Ruini, enviado por el Papa, visitó el país para celebrar el aniversario del asesinato del sacerdote Andrea Sartoro, asesinado en febrero de 2005 durante las enfebrecidas protestas por las caricaturas de Mahoma. Alguna iglesia evangélica fue bombardeada y un pastor protestante en la ciudad de Aldana fue apaleado. Los turcos que viven en Alemania han construido más de 3.000 mezquitas. El art 301 del código penal turco permite acusar a quien denigra “la identidad turca”. Así el 23 noviembre Hakan Tastan y Tural Tupan fueron acusados como tales ante el tribunal penal de Silivri por ser conversos al cristianismo.

Kazajstán es una república de estructura estatal rusa para una población islámica que tiene bastante neutralidad en lo religioso. Los cientos de miles de católicos sufren la falta de sacerdotes y de recursos desde la pasada persecución comunista pero es el primero en firmar un acuerdo con la Iglesia para garantizar su status jurídico y su libertad.

En Asia oriental

En Asia oriental los musulmanes son casi 600 millones, el doble que en los otros dos sectores islámicos, pertenecientes, sin embargo, a un número menor de países: Pakistán, Bangladesh, Indonesia, la Federación Malasia, las islas Maldivas y las comunidades islámicas en donde son minoría (India, China y Filipinas).

En Pakistán, el régimen, aliado a los talibanes afganos, ofrece cierto diálogo con los cristianos de los que un millón son católicos. El Primer Ministro Nawaz Sharif en 1997, por primera vez en la historia, ofreció una cena de Navidad para celebrar el nacimiento de Cristo con un millar de cristianos, budistas, musulmanes y shiks en un encuentro que quería resaltar la armonía que desea en su país. Auguró que no habría discriminación religiosa en Pakistán y donó más de 6 millones de rupias (unos 135.000 dólares) a las Misioneras de la Caridad de Satellite Town.

De todos modos el Presidente Muhammad Rafiq Tarar, fundamentalista ultraconservador, era favorable a implantar la sharía y Nawaz Sharif (agosto 1998) propuso a la Asamblea Nacional una enmienda a la Constitución para imponerla. La oposición (la Liga musulmana, los obispos católicos, líderes de algunas confesiones cristianas, grupos pro derechos humanos y de mujeres del país) rechazó el plan pues se trataba de desviar la atención del pueblo ante la crisis económica y las dificultades en política exterior. USA puso sanciones y el FMI había suspendido los créditos. Hacía varias décadas que las importaciones superaban las exportaciones y el déficit público rondaba el 7% del PIB: la deuda ascendía a 30.000 millones de dólares. Dos tercios del presupuesto se destinaban a gastos militares y a los intereses de la deuda. Poco menos de un millón (de los 140 millones de pakistaníes) pagaba algún impuesto.

El 21 febrero 2010 un grupo de 150 musulmanes atacaron en Karachi dos iglesias, tiendas y hogares de cristianos. Todo empezó con una discusión entre un mercader musulmán y un comprador cristiano y por la discrepancia, el vendedor llamó a colegas para darle una lección al cristiano.

En Indonesia, al final del segundo milenio, había casi 6 millones de católicos en una población de 200 millones de habitantes, el 50% musulmanes. La ideología del régimen -la Pancasila- obligaba a todos los ciudadanos a declararse miembros de alguna de las cinco religiones reconocidas: islamismo, protestantismo, catolicismo, hinduismo y budismo. Sin embargo la población todavía guardaba atávicos prejuicios raciales y los fundamentalistas islámicos indonesios, desde 1991, han destruido o dañado en Java unas 300 iglesias cristianas aunque más parece una violencia étnica que religiosa pues en esta isla se respira un clima habitual de respeto y cierto entendimiento entre los miembros de las distintas religiones.
Entre 1999 y 2001 más de mil personas murieron en Sulawesi por enfrentamientos entre cristianos y musulmanes.
En junio de 2008, extremistas musulmanes miembros del Frente de Defensores Islámicos atacaron a 200 cristianos y musulmanes moderados que se manifestaban en la capital pidiendo por los respetos a la libertad religiosa. Los agresores atacaron con palos y machetes, agrediendo a 12. Entre 2004 y 2007, gobiernos locales y grupos extremistas musulmanes cerraron 110 iglesias en el país. En septiembre de 2006, a pesar de la petición de Benedicto XVI, el gobierno indonesio ejecutó por fusilamiento a tres cristianos, condenados hacía 5 años, por liderar un ataque de turbamulta a una escuela islámica en el 2000. El hecho fue en Sulawesi central, región donde hay una neta división social por motivos religiosos.

En Malasia la Constitución reconoce la libertad religiosa pero la vida familiar se rige, como en Irán, por la ley islámica. La letra pequeña siempre es la clave. En 1997 una joven de 25 años se convirtió al catolicismo tras casarse con un católico. Su decisión provocó un escándalo nacional porque para los musulmanes era un atentado al acuerdo social no escrito que prohíbe a los no musulmanes hacer proselitismo con islámicos. En 2010, cuenta un malayo, que se bautizó estudiando en USA, que tiene una novia malaya también católica y no quiere decir donde fue bautizada para evitar represalias al sacerdote. Mientras vivía con su familia tenía que simular fe musulmana e ir a la mezquita hasta que se independizó. Tendrán que casarse clandestinamente y si tienen hijos, su mujer los tendrá que registrar como madre soltera.

En la India con 1.100 millones de habitantes, hay 100 millones de musulmanes enfrentados con el nacionalismo hindú que, con el Bharatiya Janata Party (BJP) a la cabeza, sigue cosechando triunfos electorales. Los cristianos, que no quieren usar la violencia, se encuentran entre dos fuegos. Los casi 18 millones de católicos -la mayoría son de casta baja- también padecen, por su condición de minoría, las injusticias culturales y legales de una sociedad de castas. Los primeros llegaron con Vasco de Gama en 1498 y luego Francisco de Javier desde 1542. Los cristianos, que son un 2,3% de la población, dirigen el 20% escuelas privadas, el 24% de los orfanatos y asilos y el 33% de los sanatorios para leprosos. Sin embargo, no cesan las oleadas de persecuciones como las desatadas en las navidades de 2007 en que murieron 6 cristianos, se quedaron sin hogar 5000, y ardieron 70 iglesias, 600 casas, 6 conventos y 3 seminarios.

Juan de Britto es jesuita mártir en la India junto con otros compañeros en 1693. Lisboeta con afán misionero, se hizo hindú con los hindúes y así nadie le reconocía como extraño o jesuita ni por su indumentaria, ni su lengua pues vivía como los indígenas de la costa Malabar. El último año, dejó escrito, “bauticé a cuatro mil”. Un jefe indio al convertirse decidió quedarse con una sola esposa y despedir a las demás mujeres. Una de las concubinas se vengó logrando fuera condenado a muerte por la presión al juez de los fanáticos contra el cristianismo. Murió decapitado en Urgur y su cuerpo fue pasto de las fieras. En el s XIX habrá otra persecución con más de cien mil mártires.

El asesinato del líder religioso hindú Swami Laxmanananda Saraswatim, el 23 de agosto de 2009, en Kandhamal fue seguido por seis semanas de violencia contra cristianos de la región y en otros cinco estados del país. A pesar de que la Policía culpó a un grupo marxista operativo en la zona y que éste reclamó la autoría del homicidio, grupos radicales hindúes señalaron a la comunidad cristiana como responsable. El resultado: 53 muertos, 20.000 casas y 130 iglesias destruidas y 12.000 desplazados, de los que 8.000 han celebrado la Navidad en campos de refugiados.
En 1999, Estados Unidos en su «Informe sobre los Derechos Humanos» ya alertó del aumento «de la violencia contra los cristianos» y acusó al BJP y a organizaciones radicales hindúes como el Shiv Sena y Bajrang Dal de instigar esta violencia. Ese mismo año el misionero Graham Stuart Staines, que dirigía un centro para leprosos, fue quemado vivo junto con sus dos hijos.

El santuario de Ntra. Sra. de la Salud en Vailankanni, en la bahía de Bengala, es conocido como "el Lourdes de la India". Juan XXIII, a instancias del episcopado indio, elevó el templo a la categoría de basílica menor. Desde el siglo XVI los católicos de la India vienen invocando a "Vailankánni Arókia Matha", que significa "Madre de la Salud Vailankanni". Más de 1 millón de peregrinos se concentra en la jornada anual para honrar la natividad de Nuestra Señora. En 2009 Asianews dice que cada año asisten más de 20 millones, muchos miles de enfermos. Llegan a esta aldea de 5.000 habitantes (en el Estado de Támil Nádu, diócesis de Thanjavur) desde todas partes del inmenso país. Miles y miles se confiesan musulmanes, hindúes, jainistas, shiks, parsis. Fue restaurado después del tsunami de 2004. Es tal vez el más antiguo, seguido muy de cerca por el de la "Virgen de las Gracias", en Sardana, diócesis de Meerut en el Norte del país, y por el de la "Virgen del Monte", en Bandra, archidiócesis de Bombay.

Solo el 2,3% de los 1.100 millones de indios son cristianos, pero la Iglesia ejerce una gran influencia en un país con grandes diferencias sociales.

En Filipinas, sobre todo en la isla de Mindanao, hay muchos musulmanes (5 millones de un total de 20) a los que el Frente Moro de Liberación Islámica presiona para lograr una autonomía islámica dentro del archipiélago. Los ánimos se encendieron tras el golpe de Estado militar del 27 julio 2003. Hasta entonces Mindanao era una isla paradisíaca. La guerra que dura desde hace 30 años ha provocado casi 130 mil víctimas y cientos de miles de desplazados, la mayoría cristianos, víctimas del conflicto y que han emigrado a Zambonaga. Un sacerdote claretiano español preside la ONG “PAZ” (Peace Advocates Zamboanga) que integra cristianos y musulmanes para trabajar conjuntamente. En 1994 fue el último misionero que tuvo que abandonar la isla.
La Jornada del Domund de 2009 la vivieron los cristianos filipinos pidiendo por la liberación del P. Michael Sinnott. El P. Sebastiano D’Ambra, del Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras, creó en Zamboanga hacía 25 años el movimiento “Silsilah” para el diálogo entre cristianismo e islam. Además del P. Michael habían sido raptados otros tres padres de san Columbano en los últimos 15 años.